01-05-2006

Inexistente Materia




Inexistente Materia

Cuando tu mirada sucede en mí,
ser deciden mis impulsos agitados,
tus latidos sabios enajenan los míos,
así estás en mí deslizando anhelos,
subrepticia en mi esperanza,
invadiendo la aurora de los días,
palpando con tu olor mi avidez de ti,
soy dueño de la piel de tu pecho,
de lo cóncavo en tu cintura,
poseo los espacios de tu venus,
muerdo tus orejas azoradas,
me instalo en tu concupiscencia,
ocupando tus quimeras con las mías.

Inúndame de caricias tibias,
de labios sedientos,
de senos ardientes,
del temblor de tu vientre,
muéstrame en las pausas como sucedo en ti,
como es que te abarca mi deseo,
la pasión que te arrebata,
descríbeme tus ganas,
tus formas de lujuria,
despierta mi mano en tu calor,
habitando tu tibieza,
deshago el grito en tu garganta,
con lo dulce de los besos,
entonces el alarido de tus pechos,
es emoción en mi silencio,
causa de que existas clamada.

Y tu boca canta mi pasión,
porque amas de ella la ternura,
cuando mis dedos pasean tu espalda,
mis labios mojan la prisa en tu sonrisa,
porque tu olor me grita tu pasión,
apreso tu boca para habitar tus sueños,
poniendo mis manos en tus ganas,
camino tu piel de humedad tibia,
me embriago del aroma en tu calor,
bebo el néctar de tu fuego desgarrado,
hundo mi alma en tu seno profundo,
hasta que grites tu angustia y des paso al amor.

Reverberum

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